Lluvia en Budapest

martes, 31 de agosto de 2010

museo nacional, Budapest Lluvia, frio y lluvia. Un día de perros. Sin embargo he disfrutado como un enano caminando lentamente por las calles de Pest con mi paraguas amarillo y fondeando en pequeñas cafeterías y librerías a cada rato para entrar en calor. Pensaba visitar la gran sinagoga (la segunda más grande del mundo), pero el precio de la entrada me ha hecho desistir. Rodeándola por fuera se ven algunas cosas —lápidas, esculturas…—  y con eso me he conformado. He comido un menú barato, rico, pero escasillo en un restaurante. He vuelto a entrar al mercado central, del que ya hablé hace cosa de un mes, donde he completado mi almuerzo con algunos platos de los “take-away” de la primera planta.

escultura arbol en la sinagoga de Budapestsinagoga de BudapestBudapestBudapest

Judit, Marti y yo, Budapest A eso de las cinco he ido a recoger mi equipaje al hostal. Mi base de operaciones hasta el fin del viaje se traslada a casa de Judit, mi anfitriona de los primeros días. Judit ha aceptado hospedarme por un par de días más hasta mi regreso a Barcelona. He quedado con ella a las seis y hemos ido a comprar viandas para la cena, que ha consistido en mi cada vez más internacional tortilla, de berenjenas en esta ocasión, y un par de botellas de vino. Marti nos ha acompañado. También he hablado ya de ella, es una amiga de Judit que vive en un pueblo y pasa tanto tiempo como puede en casas de amigos en la ciudad.

trabajando en la tortilla, BudapestBudapest

Sighisoara-Budapest. 675 km, 10 horas

lunes, 30 de agosto de 2010

Pues eso, un día en el tren con poca chicha. Así que os dejo con los datos: salida a las 10:37 (GMT+02:00), llegada a las 18:45 (GMT+01:00. Hora teórica, en realidad hemos llegado a las 19:52), 35€.

Sighisoara

estación de SighisoaraMe voy a permitir contaros dos anecdotillas:
1- En la estación de Sighisoara no aceptan tarjetas de crédito. No tenía efectivo suficiente para pagar el billete y he tenido que caminar de vuelta al centro de la ciudad (1 kilómetro) para sacar dinero de un cajero. Iba algo justo de tiempo, así que he sudado bastante.
2- En el tren no se puede fumar, pero mientras estaba en la cafetería escribiendo la entrada de ayer ha llegado gente y la camarera les ha puesto un cenicero. Me he encendido un cigarrillo y he ido a pedirle uno. Me ha indicado que sin consumición no hay cenicero, así que me he sentado con unos chavales que estaban tomando sus cervezas matutinas y he usado el suyo. Pensé que la mujer se habría ofendido un poquillo, pero unas horas más tarde he ido a tomar un café y me ha tratado muy amistosamente. Ha sido justo cuando hemos cruzado la frontera y cuando suben los polis del control de pasaportes la mujer esconde los ceniceros :)

tren Sighisoara-Budapesttren Sighisoara-Budapesttren Sighisoara-BudapestEstación Keleti, Budapest

Al llegar a Budapest me he ido directamente al hostal The 11th Hour Cinema, que había visto en internet. 10€ por una cama en una habitación con australianos y un brasileño muy majo que se ríe todo el rato.

Una tarde en Sighisoara

domingo, 29 de agosto de 2010

tren Brasov-Sighisoara tren Brasov-Sighisoara Creo que cinco noches en Brasov son más que suficientes. Así que esta mañana he empaquetado todo y me he puesto en marcha. He hecho un breve trayecto en tren hasta Sighisoara (2 horas, 7€). Al llegar a Sighisoara había dos holandesas con bicicletas que han tardado un rato en abrir la puerta del vagón para salir. Detrás de ellas iban dos australianos y yo el último. Cuando estaba saliendo la segunda holandesa el tren se ha puesto en marcha y los australianos han tenido que saltar al andén. Para cuando ha llegado mi turno el tren se movía bastante rápido, incluso he llegado a pensar en seguir hasta la siguiente estación. He saltado y he tenido la suerte de no caerme ni dislocarme nada.

hostal Burg, Sighisoara Una vez recuperado del susto (y el cabreo con el tipo que da permiso al tren para salir) tocaba buscar hostal. En este caso ha sido fácil porque ya había localizado uno en hostelworld.com. El hostal Burg, una casa medieval en pleno casco antiguo, 10€ la noche en una habitación que es como un pasillo abuhardillado lleno de vigas de madera con cinco camas, comparto habitación con dos australianas que también estaban conmigo en la habitación de Brasov. Ya sin equipaje he buscado un sitio para comer y ver la carrera de Formula 1 tranquilamente. El pueblo es pequeño, y calculaba que tendría tiempo suficiente para verlo todo aún perdiendo dos horas de luz por la carrera (cálculo que luego se ha demostrado correcto). Además había llovido por la mañana, aún estaba nublado y hacía fresco. Parecía como si por la tarde fuera a salir el sol (y he vuelto a acertar).

SighisoaraSighisoara SighisoaraSighisoara

torre del reloj de SighisoaraSighisoara, de 35.000 habitantes, es una pequeña población famosa por su ciudadela del siglo XII y aún habitada, patrimonio de la humanidad, y porque aquí nació Vlad III, el Empalador (1431-1476). La ciudadela es bastante impresionante, las casas medievales, la muralla, las torres, las calles empedradas, el cementerio… Todo es bonito aquí. A destacar la torre del reloj (siglo XIII) y la escalera cubierta de madera (siglo XVII) que lleva hasta lo alto de la colina, donde hay una iglesia y un cementerio que ocupa toda la ladera Noroeste de la colina. Curiosamente casi todas las tumbas son de alemanes. En un par de horas lo he cubierto todo. Por la noche he salido a dar otra vuelta que ha sido interesante porque la iluminación de las calles y edificios es bonita y hacen que el paseo nocturno sea muy interesante. Sin duda merece la pena parar aquí.

Sighisoara

casa natal de Vlad III, el empalador y torre del reloj, SighisoaraSighisoara

Castillo de Bran y fortaleza de Rasnov

sábado, 28 de agosto de 2010

castillo de Bran Hoy me he ido de excursión. He ido a Bran, a 30 kilómetros de Brasov (bus 1€). Este pueblo se ha construido alrededor de uno de los castillos más absurdamente famosos del mundo. El castillo de Bran lo construyeron los caballeros de la Orden Teutónica en 1212, cuando regresaban de que los sarracenos les patearan el culo en Palestina. Es un castillo muy interesante, adaptado a la roca de la colina en la que se encuentra, y con muchos pasillos, escaleras y recovecos. Se conserva en buenas condiciones y en el interior se exponen muebles, armas y ropas de los sucesivos nobles que lo habitaron. Lo peor es que la entrada cuesta 5 eurazos y que, debido a la absurda relación con el castillo de Drácula, hay muchos turistas. Moverse por pasillos estrechos y escaleras de caracol con mucha gente tratando de sacar fotos a todo se hace algo complicado. En las calles del pueblo más cercanas hay puestos con todo tipo de souvenirs con vampiros, sangre y lunas llenas. Incluso hay un pasaje del terror en el que vi entrar a los primeros españoles que me encuentro en varios días…

castillo de Brancastillo de Bran

puesto de souvenirs en el castillo de Brancastillo de Bran

Rasnov A mitad del camino entre Brasov y Bran se encuentra Rasnov. Aquí hay una fortaleza interesante también construida por los caballeros de la Orden Teutónica, esta en 1215. Así que a la vuelta me he parado a verla. El paseo hasta lo alto de la colina donde está la fortaleza es de dificultad media-baja, pero hoy ha sido un día de calor extremo y eran las tres de la tarde. A pesar de que la subida se hace a través de un bosque que proporciona bastante sombra he llegado arriba sudando a chorros. Al menos aquí no hay que pagar entrada. En la puerta hay un cartel en el que pone 10 leis (2,50€), pero no hay nadie allí para cobrar. Esta fortaleza es una especie de ciudadela con múltiples casas bastante rústicas y unas vistas impresionantes de las montañas por un lado y la llanura por el otro. Quitando algunas casas en las que hay tiendas de souvenirs casi todo aquí está en ruinas, así que hay pocas sombras en las que refugiarse.

fortaleza de Rasnov fortaleza de Rasnovfortaleza de Rasnovfortaleza de Rasnov

Por la noche he salido a tomarme una limonada de despedida (mañana me mudo a Sighisoara) y me he topado con el francés y el alemán de Poprad (hablé sobre ellos aquí). ¡Estos tipos están en todas partes! Hemos estado charlando un rato y resulta que están en el mismo hostal que yo. Se han ido a dormir y yo me he ido a tomar mi limonada con Botond, uno de los couchsurfers locales.

Brasov, día tres: desde lo alto.

viernes, 27 de agosto de 2010

Es cierto que tres días para visitar Brasov quizás sean demasiados, pero si habéis seguido mis entradas anteriores sabéis que me lo he tomado con bastante calma. Además esta noche el estómago me ha jugado una mala pasada y me he pasado toda la mañana en la cama recuperándome. No he podido localizar la causa del problema, pero seguro que las tres cervezas que me tomé anoche con gente de couchsurfing no ayudaron mucho…Brasov desde el monte Tampa

monte Tampa He quedado con Jannes, un alemán que conocí anoche en el meeting de couchsurfing, para comer y subir al monte Tampa, donde está el cartel hollywoodense de BRASOV. Hemos subido con el teleférico (2€) y desde allí hemos caminado hasta el pico que hay encima de las letras, de 955 metros. Hemos bajado andando por uno de los múltiples senderos que hay. Apenas una hora de paseo.

 

los Cárpatos desde el monte TampaBrasov desde el monte TampaBrasov de noche

Por la noche hemos vuelto a quedar con gente de couchsurfing, locales y visitantes. Esta vez me he dedicado a la limonada, por si las moscas. Botond, uno de los locales, nos ha llevado en coche a un mirador desde el que se disfruta de unas vistas estupendas sobre la ciudad.

Brasov, día dos

jueves, 26 de agosto de 2010

Hoy me he mudado de la habitación individual de la pensión Casa Ober a un dormitorio para ocho personas en el hostal Mara. Mucho más céntrico y barato (10€ la noche). El día ha amanecido lluvioso, pero a media mañana ha salido el sol para quedarse el resto del día.

iglesia de San Nicolás, Brasov La ruta de hoy ha sido bastante breve, he paseado por la parte rumana de la ciudad (Scheii). Allí he visitado varios cementerios y la iglesia de San Nicolás, templo ortodoxo del siglo XIII que entremezcla los estilos gótico, barroco y renacentista con una influencia bizantina. Está decorada con frescos de Mişu Pop, un famoso pintor rumano del siglo XIX. Recorriendo, ya de regreso, el exterior de la muralla de la parte alemana he llegado hasta el punto de partida del funicular que sube hasta la cima del monte Tampa. Por lo visto desde la cima salen muchos senderos interesantes de montaña. Pero estaba cansado y con hambre, así que he pensado que mejor subo en otro momento y me he ido a comer.

Me he levantado de la siesta con dolor de cabeza y malestar general. Así que he pasado la tarde leyendo, escribiendo y dormitando.

iglesia de San Nicolás, Brasov iglesia de la Santísima Trinidad, BrasovBrasov

Nota: todas las terrazas de la ciudad tienen sombrillas/toldos verdes en los que pone “Brasov” y, debajo, “Probably the best city/bar/pub/beer in the world”. Es como si la ciudad estuviera patrocinada por Carlsberg o algo.

Brasov, una ciudad alemana en Transilvania

miércoles, 25 de agosto de 2010

puerta de Catalina, Brasov Primer día de turismo en Brasov. He subido a la ciudadela, desde donde no se ve casi nada porque hay árboles enormes rodeándola por todas partes. El centro histórico, tradicionalmente rodeado por murallas, se conoce como la parte alemana de la ciudad. Los sajones se establecieron aquí en el siglo XII y “echaron” a los rumanos al Suroeste de la ciudad, fuera de las murallas. Durante los siglos XIII y XIV mongoles y otomanos atacaron la ciudad. En el siglo XIX se derribaron casi todas las murallas y la ciudad vivió una época de industrialización y florecimiento económico. Casi todas las edificaciones datan de esta época. El único punto negativo es que la calle principal, la strada Republicii ha sido tomada por las terrazas de los restaurantes, dejando para el caminante solo los laterales. Sin este gran impedimento la calle sería un referente turístico de primer nivel. En la plaza Sfatului, la plaza central, también hay terrazas, pero aquí se limitan a usar los laterales, permitiendo al visitante disfrutar del espacio. Merece la pena destacar la puerta de Catalina, la más antigua de las que quedan de la muralla (1559). También es curioso el letrero que hay en la ladera del monte Tampa con la palabra BRASOV al estilo Hollywood.

Brasovciudadela de Brasovplaza Sfatului, Brasovstrada Republicii, Brasoviglesia negra, Brasov